El protagonista de nuestra historia odia, mejor dicho, odiaba, la sopa. Porque un día, gracias a su padre, el mago de la sopa, se dio cuenta de que era posible llegar a amarla. Su padre es capaz de leer las historias que se esconden en la sopa hilando sus letras, y de esta forma descubre a su hijo aventuras como la del dragón MacDrake, que partió hacia El País del Hielo para raptar a una princesa, atravesando nubes, sorteando tempestades, esquivando rayos… Valores: Amor, Imaginación, Esfuerzo, Solidaridad, Confianza, Superación, Generosidad.
Para niños de 3 a 9 años, 60 plazas.